domingo, 16 de agosto de 2015

Maratón rio Boedo.

  Que prontito llega la hora cuando se trata de madrugar. Me he despertado unas pocas de veces durante la noche. Es lo que tiene dormir en una tienda de campaña, que se escuchan todos los ruiditos. Pájaros, el río correr, algún que otro coche, ronquidos, etc, etc....
   A eso de las 7:30 he quedado con Fortes que está en la habitación de al lado, je je je para después de vestirnos, dirigirnos al comienzo de la actividad. Hoy no hace casi frío, no como el año pasado que nos levantamos a muy baja temperatura.

   A unos doscientos metros tenemos  la línea de salida. Llegamos con tiempo suficiente para tomarnos un cafetito. Allí ya estamos preparados casi todos los que ayer hicimos la media. Juanlu (Yonhey), Fortes, Calos, Nelan, el Siete....... y un servidor.
  La intención, por lo menos la mía, es salir muy relajado para que las piernas se vayan soltando de la media de ayer y luego llegar a meta lo mejor posible.

  Se da el pistoletazo de salida. La gente suele salir mas tranquila de lo habitual y eso hace que no nos aceleremos en la salida. Una vuelta chiquitita al pueblo para ir cogiendo tono. He salido muy muy tranquilito. Sin ni siquiera mirar el reloj. Hoy toca relax.
   Al salir del pueblo y encarar la larga carretera me pongo a la altura de Carlos y Nelan. Me dicen que van a ir muy tranquilitos. a ritmo de 5:40´más o menos el kilómetro.No me va a venir nada mal y decido quedarme con ellos.
   De momento vamos haciendo kilómetros con una conversación bastante animada. Esto nos va a venir de lujo para no pensar mucho en la carrera. La mañana esta algo nublada y no hace muy mala temperatura para correr. Esperemos que siga así mucho tiempo.
  

   Llegamos a Revilla de Collazos donde los voluntarios nos dan agua. Hay que ir hidratándose bien que luego vienen las madres mías....
   Pasamos por Collazos de Boedo donde nos volvemos a hidratar con agua e isotónico. De aquí el camino de tierra hasta Bascones de Ojeda. Esta vuelta se hace bastante llevadera. Son los primeros 13 o 14 kms y de momento seguimos charlando y devorando metros casi sin darnos cuenta.
   Entramos al pueblo de partida y ya hay mucha gente lavantada y animando. Aquí nos aceleramos un poquito como es costumbre en estas situaciones. Al salir del pueblo nos quedan dos vueltas y sabemos que esta es la peor. Tenemos que volver a hacer esta larguísima recta otras dos veces.
   Poquito a poco se hace el camino y cuando nos queremos dar cuenta pasamos por la media maratón en un tiempo de dos horas justas. Esta saliendo según lo establecido así que todo perfecto.

   Ya estamos de vuelta y Nelan parece que se esta quedando un poquito. La verdad es que Carlos y yo hemos acelerado un poco. Va detrás nuestra unos kilómetros hasta que decide coger su ritmo. Ya nos dijo al principio que quería terminarla y que lo último le iba a costar así que decidimos dejar que vaya a su tran tran para no sacarle de punto.
   Carlos y yo, pasamos por el pueblo donde como el año anterior tengo a los peques dando el agua y la fruta a los corredores y a Susana inmortalizando la situación de la carrera. También esta Fortes que ha dejado solo y abandonado a Juanlu. Je je je. La verdad es que tenía claro desde el principio que haría una vuelta y luego se pararía, pero me tengo que meter un poco con él..(Flojo, mas que flojo.... je je je.).
 
 
 
 
















   Aquí nos lo tomamos con calma y cogemos agua y algún plátano para meter algo al cuerpo. Susana nos saca una buena secuencia del paso por el pueblo.
   Bueno, pues ya estamos en la tercera vuelta. Solo nos queda ir y volver.. (que cachondooooo). Vamos adelantando a varios corredores y es que hemos aumentado el ritmo considerablemente. Las piernas se han soltado y van de lujo así queeeeee........
   Por fin llegamos a Collazos y nos disponemos a afrontar la vuelta. Unos seis kilómetros para rematar la faena. Cierto es que se hacen un poco largos pero poco a poco los kilómetros van cayendo. Estamos en el último avituallamiento y las voluntarias nos animan por un megáfono. Las correspondemos dándole las gracias.



   Poco mas de un kilómetro para terminar con el doblete. Entramos al pueblo y le digo a Carlos que pase el primero que yo pasaré con los peques que estarán esperándome los pobres algo impacientes.
   En la recta de meta le choco la mano a mi compañero de viaje, le doy la enhorabuena y dejo que se lance hacia la meta. -"Gracias Carlos por aguantarme durante 42 kms, je je je. Un placer como siempre...



   Pues aquí están mis enanos, como yo los llamo, aunque dentro de nada me sacan la cabeza. Salen disparados a cogerme la mano y ya los tres entramos en meta donde nos está esperando Susana con la que me doy un besito y que, como no, Mapi esta allí para retratarlo.

   Allí saludo a los que han llegado y después de beber algo me dirijo al coche para cambiarme de ropa. Por cierto, al final este es el resultado:

   Cuando llegan todos los corredores se comienza a dar los regalos que Gabriel nos tiene preparado. Todos subimos al podium, todos tenemos los mismos regalos, aunque si que se nombran y salen a la palestra los tres primeros de cada categoría.


   Como hace tres ediciones, es un placer correr maratones hechos con tanto cariño y donde el pueblo entero esta involucrado al máximo para que los corredores nos sintamos como en casa, ofreciendo hasta sus casas para que nos podamos duchar.
   Después de clausurar el maratón con unas palabras muy emotivas de Gabriel y del alcalde, toca rematar la faena con una suculenta paella acompañada con tortilla, queso y rematada con melón.





  Da gusto estar aquí compartiendo mesa con muchos amigos y pasando un muy buen rato en un ambiente festivo.
   Me gustaaaaaaaaaaaa....
   Esto ha sido un poco por encima, junto con la crónica de la media , de lo acontecido en este pueblecito que nos ha enamorado.
  De nuevo dar las gracias a Mapi por las fotos y la alegría con las que las hace.
  Y también a vosotros que con vuestros mensajes de WhatsApp y de Facebook (aunque lo viera días mas tarde por no tener cobertura) hacéis que siga adelante. Gracias....
  Hasta la próxima.

Capi
  



sábado, 15 de agosto de 2015

Media maratón río Boedo.



...............Y a eso de media mañana nos presentamos en Bascones de Ojeda. Pueblo que llevamos visitando ya tres años. Hemos aterrizado Susana, los peques y yo, que junto con Fortes y Carmen hemos realizado el viaje juntos.
   Aquí se celebra una media maratón el sábado por la tarde (que por cierto es la segunda más antigua de España con 43 ediciones) y un maratón el domingo por la mañana.
    Nada más llegar lo mejor es montar las tiendas y prepararlo todo para la noche.

  Después vamos al único restaurante del pueblo a comer. Derechitos nos vamos a la zona de salida a por los dorsales y saludar a varios amigos. Juanlu y Mapi (fotógrafa incansable a la que debemos las mil y una foto de nuestro fin de semana) también están por aquí para disfrutar del finde.
    También saludamos a Gabriel, el artífice de todo esto. Un tipo que es capaz de sacar adelante varias pruebas en un pueblo que tiene ciento y pico habitantes y muy pocos recursos.
     Ahora viene el lío. Susana tenia claro que iba a salir a hacerla. Yo tenía pensado acompañarla en la segunda vuelta de las dos que tiene el circuito. Pero ya se sabe que el ambientillo que se forma es contagioso y al final (después de mucho pensarlo, je je je) decido hacerla entera para acompañarla y hacérsela más amena.
    Ya con los dorsales vamos a cambiarnos no sin antes meter un poco las piernas en el río Boedo que por cierto está congeladoooooooo.
 

   Bueno pues ya estamos preparados y con el dorsal puesto. En la zona de salida Mapi no para de hacer fotos. Nos saludamos unos a otros haciendo de esto casi una reunión de colegas.




   A falta de diez minutos aparece Carlos (CJ), que ha venido a correr el maratón. De lejos le decimos que se de prisa que le da tiempo a inscribirse en la media. ja ja ja. No le hizo falta mucho más y después de los tramites se colocó con el resto en la línea de salida...

   Después de unas palabras de Gabriel y del alcalde del pueblo se da la salida a la prueba. Susana y yo salimos de los últimos. De momento vamos a ir tomando contacto. Va un poco con miedo por que no lo ha preparado y cree que va un poco justa de kms. Menos mal que estoy yo ahí para "engañarla", je je je.
   

   Damos una vuelta pequeñita al pueblo para comenzar la primera de las vueltas. Vamos cogiendo ritmito de crucero. Hoy estamos muy charlatanes y no dejamos de poner muchas cosas en orden, je je je.
   Una larga recta por la carretera tenemos por delante. "Tenemos que ir por debajo de nuestras posibilidades", "tenemos que ir casi paseando" la voy diciendo.
   Poco a poco llegamos al pueblo de paso donde hay un avituallamiento.

  Al salir del pueblo giramos a la izquierda y nos metemos en un camino que no soltaremos hasta llegar de nuevo al pueblo de salida. Poco a poco vamos comiendo terreno y llegamos a la carretera principal donde nos cruzamos con Juanlu, Fortes, Carlos y un colega de este. Me quedo atrás para inmortalizar el momento.


   Estos ya están liados con la última vuelta. a nosotros nos queda dar una vueltecita por el pueblo para comenzarla.
   Susana va bastante bien y cómoda. En el pueblo hay bastante animación y esto hace que le suban los ánimos y recargue pilas.
  Comenzamos la segunda y última vuelta. Esta es más larga. Vamos solitos por las carreteras de la zona como si hubiéramos salido a rodar un día cualquiera. Poco a poco vamos quitando metros a la larguísima recta.
   Por fin llegamos a Revilla de Collazos donde tenemos un punto de agua. Los chavales del pueblo animan el paso y nos dan la deseada botellita.

   Dejamos atrás el pueblo y cogemos de nuevo la carretera. Ahora tenemos unos dos kilómetros hasta el próximo avituallamiento situado en Collazos de Boedo. No tardamos mucho en llegar. sabemos que pasando este pueblo solo toca volver al punto de partida.

   Volvemos a coger agua y darle los últimos sorbitos para afrontar la vuelta.

   Nos espera un largo camino de tierra hasta llegar a la entrada del pueblo. Susana va notando los kilómetros pero sigue a buen ritmo. La voy dejando hacer. Hoy voy de acompañante. Siempre un pasito por detrás para que sea ella la que mande.
   Según el reloj nos quedan tan solo cuatro kilómetros. "Esto está acabado" la digo. La verdad es que me está sorprendiendo como lo está afrontando. Siempre que la pregunto me dice que bien aunque se que va un poco justa. Está aguantando como una jabata.
   Llegamos al último avituallamiento donde los chavales nos animan con un megáfono. Un poco de agua. Un poco de isotónico y a rematar la faena.
   Desde aquí ya vemos el pueblo. No nos queda ni para regalar. ¡Vamos Mon Amurrrrr!.....  El reloj deja de funcionar y se apaga. No pasa nada por que estamos de nuevo en la carretera y nos quedan poco menos de un kilómetro.
   Entramos en el pueblo sabiendo que nos queda muy poquito. Una calle y recta de meta. Esto pasa sin darnos cuenta. Ya vemos la línea de meta y la gente comienza a aplaudirnos y a animarnos.
   Gran alboroto. Muchos aplausos y gritos de campeona. Estamos en los últimos 20 metros. Lo has conseguido Susana.
   Nos cogemos de la mano y entramos en meta la mar de contentos. Muy buen rodaje nos hemos cascao. Sobre todo Susana. Está super contenta. Y yo mucho mas, je je je.



   Bueno pues ya estamos aquí. Después de 2 horas y 24 minutos lo hemos conseguido.
   Bravo Susana. Lo has bordado. ¡¡Que grande eres!!
   Ahora toca reponer energías. Ir a cambiarse y volver a por los obsequios.
  


   Se está haciendo tarde y hay que cenar que mañana un servidor tiene la tiradita larga de los domingos, je je je.
   Antes de despedirme quería agradecer a Mapi su labor como fotógrafa. No ha parado de hacer fotos y de animar dejándose incluso la voz. Muchas gracias Mapi.
  Pues lo dicho. Hoy hemos terminado. mañana un poco más. Muchas gracias a todos por los ánimos y felicitaciones.
   Hasta mañanaaaaaaaa.

Capi
 

domingo, 9 de agosto de 2015

Subida al Veleta.


  Después de tres años intentándolo, parece que este va a ser el bueno. El sábado por la tarde me despido de Susana y los peques que están tan agustito en la playa y pongo rumbo a Granada. Allí primero visito a Mi gran amigo Fortes que me lleva a la zona de la salida de esta prueba para dejar allí aparcado el coche.
  Me despido de él y acto seguido voy en busca a Carlos, a Pedro y su mujer. Después de localizarlos y tomarnos una cervecita, nos dirigimos al apartamento de Pedro para cenar algo.
  Menudos macarrones con salsa carbonara se cascó nuestro compañero Carlos. Hidratos de calidad para el día de mañana, je je je.
   Bueno, se hace tarde y Carlos y yo nos vamos al apartamento, chiquito pero coqueto, para preparar todo y dormir lo máximo posible. Por la mañana quedamos con Pedro para desayunar. Son las seis y cuarto. Nos despedimos de la mujer de Pedro y nos dirigimos a la salida.
   Todavía es de noche aunque no tardará en despuntar el sol. Empieza a llenarse la zona de corredores. Una furgoneta hace las veces de ropero donde dejamos nuestras mochilas para luego, "más tarde", recogerlas en la cima del Veleta.


   Pasamos el control de chip. Estamos a cinco minutos de la hora de la salida. Carlos nos da unos consejillos ya que esta es su tercera vez.
   Muy importante salir tranquilos y no dejarse llevar por la euforia de la salida. a ritmo desde el principio.
   También nos dice que aquí lo que cuenta es el ponerse a andar, si es que lo necesitamos, lo más lejos posible.
    Dos consejos claves para poder terminar la prueba en condiciones y satisfactoriamente. Esperemos poder tenerlos presentes.
    Se da el pistoletazo de salida. Comenzamos a correr muy tranquilos. Estoy algo nerviosillo. Después de tres años intentándolo estoy aquí en la línea de salida. He leído muchas noticias de la carrera y sin lugar a dudas es muy, muy dura.






















 
  Esperemos aunque sea poder terminarla.
  Hemos dado una vuelta al paseo del salón y ahora sí, nos dirigimos a la carretera que nos llevará diréctamente al Veleta. Son unos diez kilómetros bastantes suaves, pero con continuas subidas que hay que administrar muy bien ya que vamos con mucha fuerza y si nos pasamos luego lo vamos a pagar.
   Llevamos un ritmo cómodo. A 5´30" el kilómetro. De momento hay que ir aguantando así. Vamos hablando y disfrutando del ambiente. Tenemos que hacer estos primeros kilómetros sin que nos demos cuenta que lo duro no ha empezado todavía.
   Pasada la primera hora de carrera llevamos algo menos de 11 kilómetros. Vamos según lo establecido que no es otra cosa que intentar terminar sobre las seis horas.
   Bueno pues comienza la ascensión. Esto empieza a empinarse (la carretera, digo, eh). Hay alguna zona que me recuerda a la subida desde el puente de la degollada hasta la ermita. Paramos en los primeros avituallamientos líquidos para reponer sales y agua.
   De momento no hace mucho sol así que las gafas van encima de la gorra. Llevamos unos quince kilómetros y no hago mas que buscar por las cimas la inconfundible silueta del Veleta. De momento no la he visto pero no estará muy lejos, je je je.
   Carlos se ha adelantado un poco y Pedro se ha parado en una ambulancia para apañarse la rozadura en un dedo así que me encuentro subiendo solo.
    Voy adelantando a varios corredores. He cogido un buen ritmito y espero llevarle lo más lejos posible. Hablo con algún corredor para hacer más amena la subida. también comenzamos a adelantar a otros que ya han comenzado a andar.
    Poco a poco llego a un avituallamiento, que no están mal por cierto, quizás le faltase algo de azúcar en forma de chocolate o gominolas, je je je, y allí esta Carlos. Salimos del avituallamiento juntos y después de explicarle donde se había quedado Pedro continuamos la subida hacia nuestro objetivo.

   Carlos lleva una cámara en la cabeza y va grabando algunos tramos de la subida. Pasamos por la media maratón. Llevamos algo más de dos horas y de momento vamos con bastantes fuerzas.
   Continuamos juntos unos cuantos kilómetros hasta que parece que mi ritmo es algo más rápido y me voy despegando de mi compañero. Paso por el km 30. Aquí vamos adelantándonos los corredores unos a otros dependiendo de las fuerzas de cada momento.
   Yo continuo pensando en las palabras de Carlos:  "Poquito a poco y comenzar a andar lo mas tarde posible".
   Miro para arriba y en una curva comienzo a divisar esa silueta que llevo en mi imaginación desde la salida. La imponente cima del Veleta se deja ver por fin. Quedan menos de 20 kms y yo la veo a tomar por cul............... Después de observarla durante un rato mientras sigo dando zancadas sin parar, vuelvo a agachar la cabeza y a fijarme que el negro asfalto cada vez se pone más cuesta arriba.
   Hay muchos momentos para pensar en infinidad de cosas. Entre ellas, lo agustito  que estaba yo en la playa con Susana y los peques. Esto me hace apretar los dientes y tirar para arriba por ellos. Esto es gasolina de la buena....
    Creo que es en el km 36 donde después de un avituallamiento comienzo a caminar un poco. Rápido pero a caminar. ¡¡Joder con la cuestecita!!. A partir de aquí comienzo a correr alternando con andar. Voy casi más rápido andando que corriendo pero mientras pueda iré corriendo.
    Pasado el 40 comienza a aumentar el desnivel y además se ha levantado un aire frío y está empezando a llover. Pufffff, menudos kilómetros nos esperan, je je je.
    Entro en los siete últimos y al lado mío se pone un ciclista que me da ánimos. me fijo que lleva un tatuaje del emblema de la legión y no dudo en entablar conversación con él. Después de ponernos al día los dos se despide de mi y sigue su camino. Unos cuantos cientos de metros que se me han pasado sin enterarme...


    Miro a la derecha y además de ver toda la subida serpenteante llena de corredores, diviso el centro de alto rendimiento de deportistas de élite. Espectacular. me llama mucho la atención donde están situadas estas instalaciones. A más de 2.000 metros de altura. Y además son impresionantes.
   Km 45 mas o menos. Algunos ciclistas, paseantes y atletas que están bajando no dejan de animarnos: "Vamos que lo tenéis", "Vaya máquinas", etc,etc.
   Aquí me da caza Pedro que se pone a mi altura. Ya sabía yo que este crack me iba a dar caza. Me dice que venga que nos vamos para arriba. Le digo que llevo el isquio derecho al límite. Como de un paso más largo de la cuenta siento que se me va a romper. Me ofrece azúcar y glucosa y no dudo en tomármelo todo...
   "Venga tira que vas muy bien", le digo. Poco a poco se va despegando de mí. Va como todos en este momento. Con un continuo corri-anda...
    Yo sigo mirando la cima de ese gigante y se que a este le tengo ya derrotado. Me queda muy poquito y aunque sea a gatas conseguiré subirme a su chepa.
   Un poco más atrás localizo a Carlos que viene como yo, apretando los dientes para rematar esta locura.
    A falta de un par de kilómetros se pone a mi altura y consigo aguantarle unos 300 metros, pero el isquio me vuelve a avisar y me dice: "¡Quieto que te atizo!"... Así que cojo mi ritmito de nuevo y me dejo caer poco a poco.
    Vamos dando la vuelta a la montaña y visualizando la meta. Estoy dejando un último cartucho para hacer la última subida de entrada a meta corriendo y con buena cara..
   Giro brusco a la derecha y allí está. El arco de meta sobre la cima del Veleta. Una cuesta llena de piedras y bastante pronunciada que consigo hacer corriendo y con las mejor de las sonrisas dentro lo que cabe, je je je.
    Paso por meta en 5 horas y 53 minutos. Por fin estamos aquí. En algo menos del tiempo previsto. Me reuno con mis compañeros para felicitarlos. Pufff que paliza nos hemos metido. Hemos derrotado al gigante granadino....

   Las vistas son espectaculares y después de deleitarnos con ellas un rato decidimos ir bajando a la zona del autobús para emprender el descenso.

   Para llegar a Granada tenemos que coger primero un microbús, luego un telesilla donde el frío se hace notar. Esto es grabado por nuestro compi Carlos y es la mar de gracioso.
  
 
  Después cogeremos un funicular con la cabina cerrada y donde tenemos más calor que un albañil alicatando una pirámide (palabras de un andaluz compañero de viaje, je je je).
   El funicular nos dejará en la estación. Zona de hoteles y comercios y donde nos hacen entrega del trofeo y de un avituallamiento especial para llenar los depósitos.
   Después de comer sentados en una terracita, hay que subirse a un autobús que después de tres cuartos de hora de viaje (aquí te das cuenta de lo que has estado subiendo) nos deja en la zona de la salida.
   Pues ya en Granada, Nos despedimos los tres. Pedro se queda un día más en la ciudad. Carlos cogerá un autobús para Madrid y un servidor se va de nuevo al la playa a descansar unos diitas...
   Pues otra que no me cuentan. Carrera bastante dura no solo físicamente sino que también te pone a prueba mentalmente.
   Ya os dejo tranquilos, pero solo hasta el domingo que hay otra preparada, je je je.
   Gracias por vuestros ánimos, me han venido de lujo....
 
 


  Por cierto, que en menos de cinco horas pasé de estar a mas de 3.300 metros a estar a 0 metros. Eso sí, con el trofeo de haber estado allí, je je je.


  Capi